Desaparición: Detienen a pareja por robo de niña hace 28 años en Ciudad de México

La Fiscalía de la Ciudad de México detuvo este lunes a una pareja en Toluca (Estado de México) por su presunta participación en el robo a Juana Bernal hace 28 años en el Bosque de Chapultepec, el jardín más famoso de la capital. Era el 1 de octubre de 1995 y Bernal, que en ese momento tenía tres años, había ido a pasar un día en familia al zoológico y al jardín. Lorena Ramírez, su madre, dejó de saber de ella a las cuatro de la tarde. Tuvieron que pasar 27 años para que una prueba genética llevara a Ramírez y Rocío Martínez —nombre actual de Bernal— a reencontrarse como madre e hija.

La prueba de ADN que confirmó el 99.9% de las coincidencias genéticas entre las dos mujeres dio pie a que el Ministerio Público iniciara proceso judicial contra Patricia N y Antonio N. Las detenidas fueron trasladadas al Centro de Reinserción Social Femenina Santa Martha Acatitla y al Norte. Prisión Preventiva Masculina, respectivamente.

Ramírez había pasado casi tres décadas imaginando cómo sería su hija, dónde estaría o si la volvería a ver. “Nunca perdí la esperanza, nunca dejé de buscar”, dijo la madre a EL PAÍS en una entrevista el pasado mes de octubre. Tras ver que Martínez había desaparecido esa tarde de octubre, su primera reacción fue correr hacia el portón del parque que daba a Paseo de la Reforma, contarle a un policía lo que acababa de pasar y exigirle que cerrara los portones de los jardines. para tratar de encontrarlo. Esperó en la entrada para ver si en algún momento alguien le devolvía al niño de tres años. “Pero eso no sucedió”.

La pequeña Juana es ahora Rocío Martínez. Tiene 30 años, está casada y tiene dos hijos. Creció en Toluca, el mismo municipio donde la Fiscalía detuvo este lunes a sus dos presuntos ladrones. La ciudad de alrededor de 873.000 habitantes está a unos 50 kilómetros de la Ciudad de México, una distancia que mantuvo separadas a Martínez y su madre biológica durante casi tres décadas.

Martínez comenzó a buscar información sobre niños perdidos y robados en Internet, hasta que un día encontró una foto. Lo comparó con la cara de su bebé y se convenció de que se parecían. “El parecido físico era tan grande que dije: ‘Yo soy esa persona'”, explicó a este diario.

Las casi tres décadas que han mantenido separados a Ramírez y Martínez muestran algunos de los casos de un país en el que el número de desaparecidos supera los 100.000 desde 1964, año en que se inició el conteo.

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